Camargo
Al occidente de la bahía de Santander se extiende el municipio de Camargo, en una estratégica ubicación, inmediata a la capital autonómica. En sus 36,6 km2 de superficie se distribuyen ocho entidades de población: Cacicedo, Camargo, Escobedo, Herrera, Igollo, Maliaño, Muriedas –sobre la que recae la capitalidad– y Revilla. Todas ellas tienen el privilegio de estar integradas en una de las áreas más dinámicas de la región.
Emplazamiento y accesibilidad son algunas de las claves de la historia económica de Camargo, marcada por un pujante desarrollo industrial a lo largo del siglo XX, que en las últimas dos décadas ha perdido fuerza frente al crecimiento del sector servicios. Todo ello se ha reflejado en un incesante incremento de su población a lo largo del siglo, primero debido al copioso contingente de inmigrantes que atrajo la industria y más tarde motivado por los atractivos de Camargo como espacio residencial alternativo a Santander. En el año 2003 cuenta con 25.676 habitantes, lo que le convierte en el tercer municipio de Cantabria por número de habitantes.
A pesar de la intensa urbanización del territorio y de las transformaciones en su paisaje, Camargo conserva un interesante patrimonio. Las marismas y las manchas de encinar cantábrico son buenos ejemplos de ecosistemas naturales, mientras que la cueva de El Pendo, las termas romanas de Parayas, la casa natal de Pedro Velarde (hoy en día Museo Etnográgico de Cantabria) y el palacio del Marqués de Villapuente muestran la riqueza del patrimonio cultural. Permanecen también muchas fiestas populares de larga tradición, como las de la Virgen del Carmen y San Juan, a las que se unen actividades nuevas que enriquecen la vida municipal.