Según el vicepresidente de Cantabria, Pablo Zuloaga, ha mencionado que la comunidad de Cantabria previene a empezar a vacunar a personas a partir del 15 de febrero contra el covid-19, por lo que se empezará a suministrar la dosis de Pfizer, aun cuando se verá disminuida en un 20% las dosis que se tenia planeado acoger en la tercera entrega de la dosis Moderna, con lo que disminuye a las 1.600.
Además ha recalcado que durante la actual semana se previene transmitir la segunda dosis de vacuna de Pfizer en más de 75 centros de salud y residencias, contando así con más de 6.000 dosis. Complementando así, que la próxima semana se integrará la segunda dosis. Asimismo, ha expuesto que la comunidad autónoma tiene una gran posibilidad de excedente para poder administrar la dosis que admite. Sin Embargo, existe carencia de vacunas por los problemas de suministro de los laboratorios, por lo que se ha tenido que reajustar los calendarios que tenían previsto para la vacunación.
De igual manera, ha dado detalles que, según el Ministerio de Sanidad, las vacunas se irán ajustando a partir del 15 de febrero, por si sucede, se podría emprender la vacunación para los nuevos grupos, continuando las indicaciones que se irá determinando por el Ministerio de Sanidad. Con respecto a la vacuna de la Moderna, ha declarado que todos los países de la UE se verá disminuida la cantidad de dosis que se tenia revista en la próxima entrega.
Por lo que se refiere a Cantabria, ha explicado que la tercera entrega se había tenido previsto percibir 1.9000 dosis, pero en la primera solamente fueron 500 dosis y en la segunda consiguieron unas 800 dosis. Sin Embargo, se previene que llegará unas 1.600 dosis lo que se considera una disminución del 20%. Conforme a la opinión de Pablo Zuloaga, puede ser que la empresa Moderna ha acreditado que el problema de debe a la demora en la entrada en funcionamiento en el ingreso del funcionamiento de las nuevas líneas de producción. De igual manera, con la nueva llegada de la vacuna Moderna, se tiene previsto vacunar a los profesionales de los centros sanitarios públicos que no pudieron recibir la primera dosis por distintos motivos.